Estados Unidos. Esta subvención será destinada a desarrollar una innovadora planta piloto que podría transformar la producción de caucho sintético, alejándose de los combustibles fósiles.
La iniciativa se centrará en la conversión de etanol en butadieno, un componente clave en la fabricación de neumáticos, utilizando un proceso más sostenible y potencialmente más económico.
El proyecto, que se realizará entre Bridgestone y el Laboratorio Nacional del Pacífico Noroeste (PNNL), busca evaluar la viabilidad de un proceso termoquímico que utiliza un catalizador patentado y desarrollado conjuntamente por ambas organizaciones. Esta técnica podría reducir significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero, alineándose con los objetivos de la administración estadounidense de lograr una economía neta cero.
“Este proyecto marca un hito en nuestros esfuerzos para transformar la industria de los neumáticos y contribuir al avance de tecnologías más sostenibles”, dijo el Dr. Mark Smale, director ejecutivo de Ciencia Básica de Polímeros de Bridgestone. “Estamos emocionados por el potencial de este proceso innovador y agradecemos el apoyo del DOE en esta aventura hacia un futuro más verde”.
El butadieno, un derivado comúnmente extraído de los combustibles fósiles, es esencial en la producción de caucho sintético. La iniciativa de Bridgestone no solo busca comprobar la viabilidad económica de la conversión de etanol en butadieno, sino también explorar cómo este nuevo método podría sustituir gradualmente el uso de fuentes no renovables en la producción de neumáticos.
Cronograma del proyecto:
- Año 1: Diseño de la planta piloto
- Año 2: Construcción de la planta en Akron, Ohio
- Año 3: Inicio de operaciones y evaluación de resultados
Este proyecto refuerza el compromiso de Bridgestone con su iniciativa Compromiso E8, centrada en la sostenibilidad, con metas claras hacia el 2050, como el uso de materias primas 100 % sostenibles en todos sus neumáticos a nivel mundial.