Estados Unidos. General Motors ha bloqueado la instalación de una solución del mercado de repuestos que permitía la compatibilidad con Apple CarPlay y Android Auto en su plataforma de vehículos eléctricos Ultium.
La medida deja a los propietarios sin alternativas después de que la compañía eliminara oficialmente estas funciones en sus modelos más recientes.
Desde 2023, GM tomó la decisión de retirar la compatibilidad con Android Auto y Apple CarPlay en sus nuevos vehículos eléctricos, apostando en su lugar por Ultifi, su propio sistema de integración con teléfonos inteligentes. Según la automotriz, esta estrategia le permitiría ofrecer una experiencia más integrada con el vehículo y mejorar funciones como la autonomía y el preacondicionamiento de la batería.
Sin embargo, la decisión generó molestia entre los consumidores, quienes vieron desaparecer una función clave sin una alternativa clara. En respuesta, White Automotive and Media Services (WAMS) desarrolló un kit de integración para devolver la compatibilidad con estas plataformas.
GM impide la instalación de la solución alternativa
El kit de WAMS, que permitía una integración similar a la de fábrica, solo estaba disponible a través de un concesionario: LaFontaine Chevrolet en Plymouth, Michigan. Sin embargo, recientemente GM ordenó que se detuviera la venta e instalación del producto, según reportó The Drive.
Además, el fabricante del kit lo retiró de su sitio web, señalando que ya no era viable seguir comercializándolo. GM justificó su decisión argumentando que cualquier modificación no aprobada podría generar problemas de seguridad y anular garantías.
"Los servicios del mercado de repuestos que introducen funciones no diseñadas, probadas y aprobadas por GM pueden causar problemas imprevistos para los clientes. Estos problemas podrían afectar funciones de seguridad críticas y anular partes de la garantía del vehículo", afirmó un portavoz de la compañía.
Con la única alternativa del mercado de repuestos bloqueada, los propietarios de vehículos eléctricos de GM quedan sin opciones para recuperar Apple CarPlay y Android Auto.
El caso resalta una creciente preocupación en la industria: a medida que los automóviles dependen más del software, los fabricantes tienen mayor control sobre las funciones disponibles y pueden decidir eliminarlas o bloquearlas tras un sistema de suscripción, incluso si el hardware ya está presente en el vehículo.
Esta tendencia ha generado críticas en la industria, con usuarios que consideran que las automotrices buscan rentabilizar al máximo cada función a expensas del consumidor. Mientras tanto, los propietarios de los nuevos vehículos eléctricos de GM deberán conformarse con el sistema propietario de la marca, sin la opción de utilizar las plataformas móviles más populares del mercado.